jueves, 27 de agosto de 2015

La luz que no puedes ver

Hacía muchas, muchas semanas que un libro no me gustaba tanto. Y ya lo adelanto: es lo mejor que he leído en 2015. La editorial Suma de Letras se atrevió a publicar esta novela y semanas después premiaron el libro de Anthony Doerr con el Pulitzer a la Mejor Novela de Ficción.


Portada de 'La luz que no puedes ver'

Marie - Laure es una niña ciega y es hija del conserje del Museo de Historia Natural de París. Su gran pasión es la lectura y desea que llegue su cumpleaños para que su padre la sorprenda con una nueva historia de Julio Verne, su autor preferido. Los dos forman un equipo especial, de esos inquebrantables... Hasta que llega la Segunda Guerra Mundial y tienen que huir a Saint - Malo, un pequeño pueblo de la Bretaña francesa amurallado y en el que esperan pacientemente que los bombardeos y la muerte cesen. No se van solos, ya que un gran secreto, una negra leyenda les acompaña y será clave en el desarrollo de la historia. En Saint - Malo Marie - Laure se encuentra con Étienne, su "loco" tío abuelo y la persona que les da refugio. Es tan soñador como ella y desde el principio siente gran afecto por la pequeña. El destino hace que en Saint - Malo también se encuentre Werner, un joven soldado alemán especialista en radios y sistemas de transmisión, algo que irremediablemente les une por su pasado y por su presente.

Hablar de 'La luz que no puedes ver' es hablar de una de las mejores novelas de 2015. Desde luego lo mejor que he leído en lo que va de año. Anthony Doerr demuestra que no hace falta lenguaje malsonante, vísceras o escenas desagradables para recrear y emocionar contando un episodio bélico de la Segunda Guerra Mundial. Esta lectura es mucho más que recrear una batalla o un asedio, esta novela es un homenaje a todos los héroes anónimos que a través de acciones que pasaban desapercibidas consiguieron vencer a aquellos que les quisieron dominar. 

Marie - Laure y Werner son dos personajes únicos y especiales, dos protagonistas que recordaremos con el paso de los meses y de los años y a los que seguro volveremos cuando tengamos la necesidad  de reecontrarnos con dos amigos de esos de toda la vida, de esos que siempre están ahí. Y es que es muy difícil explicar con palabras lo que los dos jóvenes hacen sentir a los lectores, al menos lo que me han hecho sentir a mí. Marie - Laure y Werner son dos chicos que han vivido historias totalmente opuestas, vidas paralelas que distan mucho entre sí. Los dos han sufrido, cada uno a su manera, y los dos han tenido que superar los retos y dificultades que se les han planteado por el camnino. Y aunque parecen distar, los dos han sentido la soledad en las noches más frías y oscuras, y han sentido el miedo de la guerra y el miedo de perder lo que más quieren. 

'La luz que no puedes ver' es una novela MARAVILLOSA, increíblemente BELLA. Y lo pongo en mayúsculas porque no encuentro ni la forma ni las palabras para expresar lo que me ha hecho sentir. Porque una vez la tienes entre las manos no puedes dejar de leer, lo único que deseas es adentrarte en Saint - Malo, y seguir la pista de estos dos chicos y el resto de vecinos y familiares, porque pasan muchas cosas emocionantes y sorprendentes y el final es MAGNÍFICO. 

A pesar de que la Segunda Guerra Mundial pueda perecer un tema manido, esta novela es diferente , es una historia que se sale de la norma por lo que cuenta y por como el autor nos lo cuenta. Un lenguaje bello y sencillo, con continuos flashbacks tan bien llevados y una ambientación de lo más conseguida, con esto, Anthony Doerr consigue que los lectores echen a volar su imaginación y se encuentren, de pronto, bajo las bombas en Saint - Malo. Porque sí, esta novela también es cruel, porque la guerra lo es, porque la muerte lo es y gracias a estas lecturas, no lo olvidamos.

IMPRESCINDIBLE. 

miércoles, 19 de agosto de 2015

Cómo encontrar el amor a los cincuenta

Cada verano, en cada viaje, me pasa. Es ir a visitar una ciudad concreta y buscar novelas y libros que hablen de ella, y este año no podía ser menos. Vengo de PARÍS, la Ciudad de la Luz, un sitio del que es difícil no enamorarse, no sentir por sus calles o en sus monumentos. Paseando por una librería, vimos en la mesa de novedades 'Cómo encontrar el amor a los cincuenta' y no lo dudamos, nos hicimos con la novela de Pascal Morin porque la verdad, la portada ya nos pareció bellísima (sí, sí, fue "una de esas compras"). 

Portada de 'Cómo encontrar el amor a los cincuenta'

Soy de las personas que opinan que nada ocurre por casualidad, que todo pasa por algo, que hay una razón, y parece que - por lo menos-  en esta novela mis sospechas se confirman. Catherine Tournant es una sofisticada profesora parisina que afronta la soledad como un estadio más de su vida. Separada y con una hija a la que no ve, afronta su día a día entre la desidia, la rutina y el placer de que nada extraño ni paranormal ocurra. El día del entierro de la madre de  una de sus alumnas, Natacha, parece que su vida cambia. Catherine vuelve a enamorarse, pero de una manera más madura, pero menos segura. Su conquista, Robert, es un senegalés con el que comparte aficiones y en cierto modo, su manera de mirar la vida, pero todo es más complicado de lo que parece, o eso piensa Catherine, ya que el color de piel de su pareja parece un obstáculo. A estas alturas de la vida y del siglo. 

Como si fuera una Matrioska esta historia se va desenmarañando y vamos observando como todo está unido, mucho más de lo que pensamos. ¿Quién no ha escuchado hablar de la teoría de los seis grados de separación

'Cómo encontrar el amor a los cincuenta' es una historia de amor, sí, y sucede en París, pero también es una historia de segundas oportunidades, una historia de superación de complejos y de prejuicios, porque aunque no lo reconozcamos, todos los tenemos.

Lo políticamente correcto, los miedos, las barreras personales, la alegría por quitarse un peso de encima y no sentirse culpable, el remordimiento, la culpa, el qué dirán, la soledad, las segundas oportunidades o la cuestión racial son algunos de los temas que Pascal Morin aborda en esta pequeña novela que no por eso es banal. El autor plantea (y demuestra) que incluso las personas más liberales, más preparadas y que a priori son más inteligentes para entender que el mundo cambia y la sociedad evoluciona, pueden ser las que más prejuicios tienen a la hora de abordar algún tipo de relación (sea del tipo que sea). Esa "superioridad" puede ser su mayor barrera y en este caso, la protagonista, aprende (o lo intenta) a deshacerse de todos esos pensamientos que la impiden avanzar como persona y en sus relaciones. Si lo consigue o no, es algo que tendréis que averiguar durante la lectura. 

El ritmo ágil de la narración, los diálogos, la tercera persona y los capítulos cortos ayudan a que pronto el lector se sumerja en algo más que una novela, en una reflexión social sobre lo que queremos ser, lo que aparentamos ser y lo que en realidad somos. 'Cómo encontrar el amor a los cincuenta' es una crítica social a todo esto, o al menos es como yo lo he entendido. El debate, al menos interno, está asegurado cuando se cierra la última página. Recomendable.




viernes, 7 de agosto de 2015

Mini Reseñas VERANO 2015

Pues sí, el verano insiste en quedarse y este calor sofocante que cruza la península apenas nos deja pensar... Y no es mentira. Llevo unas semanas en las que apenas me apetece leer y si lo hago, apenas puedo mantener la concentración. De reseñar, ni hablamos. Por eso, y como no me gustaría dejar de hablar hablar de todos los libros que he leído, os traigo  tres MINI RESEÑAS, de tres novelitas (lo digo por el número de páginas) que a mí me han parecido muy especiales. 

¡Espero que os gusten! 

MÚSICA PARA FEOS, de Lorenzo Silva


Portada de 'Música para feos' 

Mónica tiene treinta años, es periodista y no ha tenido suerte en el amor. Un día, cosas del destino, conoce a Ramón, un hombre enigmático, pero que parece que le da todo lo que ella pide: comprensión, un poco de cariño y algo de sexo. Poco a poco van construyendo su historia de amor particular. El destino, es un protagonista más de la novela y vuelve a jugar su papel en la vida de estos personajes que parecen tocados por la mala suerte. 

'Música para feos' es una historia de amor desgarradora, tan natural como la vida misma y escrita por uno de los grandes. Por supuesto, y para hacer honor al título, las canciones acompañan al relato, capítulo a capítulo, para hacerlo más especial si cabe. ¿Qué historia de amor no tiene banda sonora?

ALGUIEN COMO TÚ, de Xavier Bosch


Portada de 'Alguien como tú'

Cuando recibí este libro como regalo sorpresa, me acordé que había leído algo más del autor, y efectivamente encontré la reseña de 'Hombres de honor'. 'Alguien como tú' es otra historia de amor y esta vez el lector viaja en el tiempo junto a sus protagonistas. París - Barcelona es el eje en el que todo ocurre, es donde Paulina y Jean - Pierre avivan su amor, un amor imposible para la época pero que ellos hicieron real. Gina, hija de Paulina, viaja al pasado para descubrir y conocer el gran secreto (y el gran amor) de su madre.

El pasado y el presente se mezclan en esta historia de secretos, amores pasados y mentiras. Gina, la gran protagonista, revive la pasión de una madre, que fue una valiente en la época en la que le tocó vivir. Y no dejará de sorprenderse por las revelaciones y secretos que irá descubriendo a lo largo de la narración. Y es que muchas veces creemos que conocemos muy bien a nuestras personas más cercanas... Recomendable para los amantes de las grandes historias de amor. Una novela muy especial. 

ME ENCONTRARÁS EN EL FIN DEL MUNDO, de Nicolas Barreau


Portada de 'Me encontrarás en el fin del mundo'

De nuevo París como escenario de una historia de amor. Jean - Luc, un conocido galerista parisino descubre que no tiene todo bajo control como él creía. Acostumbrado a tener las mujeres que guste, una de ellas, misteriosa, le vuelve loco. Cartas y correos electrónicos se acumulan en su buzón de entrada y sin saber quien es ella, se enamora perdidamente. La sorpresa final será de traca y sabrá entonces que su chica estaba más cerca de lo que pensaba.

Nicolas Barreau se ha especializado en un género que domina a la perfección: historias breves de amor en la Ciudad de la Luz. Son simples y fáciles de entender y hacen que el lector vuele hasta París el rato que dura la lectura. No hay que pedirle más y sabes lo que vas a leer. A mí me ha gustado y ha sido una novela que he disfrutado antes de mi viaje a París. 


Y vosotros, ¿habéis leído alguno? :) ¡Feliz verano y felices lecturas!